miércoles, 15 de abril de 2015

Enrique Meneses. La vida de un reportero

Fotografió lo que presenció, con la genuina intención de obtener una imagen para documentar un hecho. Despreció todo artificio estético y actuó como fotógrafo ausente para no alterar el momento. Llegó a Egipto en pleno auge nacionalista del nuevo régimen del presidente Nasser; vivió durante cuatro meses la aventura de atravesar África, y contó en primera persona la Guerra de Suez, los inicios de la revolución cubana en Sierra Maestra (fotografiando a unos jóvenes hermanos Castro) y las tensiones de la Guerra Fría personificadas en Kruschev y Kennedy. También escuchó el sueño de Martin Luther King y el Blowing in the wind de Bob Dylan en el Lincoln Memorial de Washington. Acompañó el féretro de JFK al cementerio de Arlington y el del Aga Khan al mausoleo de Asuán. Entrevistó al Shah de Persia, a Hussein de Jordania y a innumerables personalidades del mundo de la cultura y el arte. En julio de 1993, ya enfermo, asistió al cerco de Sarajevo, lo que sería su último trabajo como enviado especial y, posteriormente, continuó su vocación profesional desde su casa, por medio de blogs y con la ayuda de jóvenes colegas.
 la exposición Enrique Meneses. La vida de un reportero, que podrá verse en la Sala Canal de Isabel II (C/ Santa Engracia, 125), desde mañana y hasta el 26 de julio, dentro de la Sección Oficial de PHotoEspaña 2015. La muestra, que ha contado con el apoyo de la Fundación Enrique Meneses, se enmarca en la línea de trabajo de la Comunidad de Madrid dedicada a la recuperación de grandes figuras de la fotografía española. Esta será la primera gran exposición que recupere el trabajo de este incansable reportero tras su fallecimiento.